El tema del que voy a hablar hoy para mí es muy complejo puesto que es
un tema muy polémico y, sin duda, por lo que será recordado este GH 12
más 1.
Cuando entró Noemí Merino por la puerta de Guadalix (del revés)
se mostró como una persona vitalista, espontánea y guerrera.
Posiblemente fue uno de los concursantes que más llamó la atención por
su belleza y por su gran carisma.

A los días, y con la negativa de Noe hacia un acercamiento con el
italiano, pudimos ponerle nombre y nacionalidad al chico que esperaba
fuera a la joven: un italiano de nombre Paolo. Esto nos hizo entender por qué Noemí no quería tener nada con Alessandro: había sufrido con Paolo
y lo achacaba a la personalidad de los del país en forma de bota. Nada
hacía presagiar lo que ocurriría a lo largo de su estancia en Guadalix.
Poco a poco empezó a surgir el feeling entre Noe y Aless,
el amor parecía estar floreciendo entre los concursantes del reality.
Múltiples caricias, besos y miradas hacían enloquecer a los espectadores
de GH y nos hacían olvidarnos de la persona que la canaria tenía en
Lanzarote.
A pesar de las muchas veces que Alessandro le dejó claro a Noemí que no tenía intención de tener una relación seria, el italiano se dejaba querer y Noe cada vez estaba más entregada a los brazos del guapo spaghetti.
Cuando Big Brother Brasil escogió a la canaria para que se fuera de
intercambio a la casa de la ciudad carioca, nadie imaginaba lo que allí
iba a suceder. En su despedida con Alessandro, este le dijo que disfrutara y se lo pasara genial, y parece que Noe se lo tomó al pié de la letra: no tardó ni tres días en meterse en la cama de Fael, un guapo brasileño que se convertiría en el ganador del concurso.

Cuando Noemí regresó a Gran Hermano prometió contar todos los
detalles de su estancia en Río de Janeiro, pero no fue así. La canaria
se guardó esa información hasta que el programa decidió que tuviera
lugar la repesca: Cristian y María volvían a la casa de
Guadalix con toda la información del exterior.Los repescados, si bien es
cierto que pusieron entre las cuerdas a Noe en alguna que otra ocasión, no confesaron tan suculenta información y, por tanto, Aless continuaba ignorando el escarceo de su chica con Fael.
Las dudas empezaban a aparecer en la relación del milanés y la
tinerfeña, sobretodo cuando gente del exterior a través de un megáfono
gritaron la ya popular frase: "Noemí, falsa, que te has liado con Fael". Alessandro se encontraba entre la espada y la pared: por una parte todos los indicios apuntaban al engaño de Noe mientras que ella lo negaba hasta la saciedad. Aless decidía creer en su chica, pero no sin bajar la guardia: ya nada volvería a ser como antes.
No fue hasta que Alessandro se proclamó primer finalista de la edición 12 más 1 hasta que pudo ver con sus propios ojos la breve pero intensa estancia del Noemí en BBB. Cuando esto tuvo lugar, Aless
volvió a demostrar su caballerosidad y sin dejar mal a Noe, le dijo lo
que muchos pensábamos: que le había dejado en ridículo y se había reído
de él.
Si bien es cierto, que Noemí y Alessandro no tenían
ninguna relación larga ni seria, cuando tienes momentos de intimidad con
una persona y le confiesas tu amor lo mínimo que debes hacer es
demostrarle respeto. Y en mi opinión, Noe se lo perdió en el
momento en el que pisó la casa de Guadalix y se metió en su cama sin
contarle que hacía 24 horas había estado en la de otro.
La mentira es el sustantivo que ha acompañado a Noemí Merino a lo
largo de su estancia en GH, nada ni nadie se ha escapado de los engaños
de la guapa canaria. Mucha gente dice que todo el mundo miente, y yo
digo que eso no lo convierte en algo bueno. Mentir no está bien, y es
algo que nos enseñan desde que somos pequeños. Si Noemí sólo hubiera mentido en referencia a su "lapsus de maldad", la gente no la hubiera castigado. Si
Noemí sólo hubiera mentido en referencia a sus baños piscineros y duchas en cueros, la gente no la hubiera castigado. Si
Noemí sólo hubiera mentido en referencia a su dedicación al surf y
no al bodyboard, la gente no la hubiera castigado. Pero cuando sumas
pequeñas cosas al final se convierten en una gran cosa y, sobretodo,
cuando haces daño a una persona a la que dices querer y que la gente
tiene aprecio, el precio a pagar es mucho más alto.
El precio que ha tenido que pagar la canaria por sus mentiras y engaños
continuos durante su concurso, en mi opinión, es muy alto. No debe ser
fácil que todo el mundo opine y te juzgue por mucho que sepas donde te
metías. Noemí está sufriendo las consecuencias de sus hechos
durante su estancia en la casa de Gran Hermano. Hubiese sido todo mucho
más fácil si Noe hubiera ido con la verdad por delante, y me atrevo a decir que podría haber sido la ganadora de esta edición 12 más 1.
Desde aquí quiero decir que deseo una pronta recuperación para Noemí Merino y decir que después de la tormenta siempre llega la calma, que esto no deja de ser un concurso. Muchas gracias por leerme.
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